Una de las víctimas llegó a España embazada de cuatro meses. En
cuanto el líder de la organización se percató, inició gestiones para que
una familia se hiciera cargo del menor en cuanto naciera, pero durante todo el embarazo siguió siendo explotada sexualmente.
Dos días después de nacer, el menor pasó a manos de su nueva
familia y la víctima rechazó hacerse cargo de él para que la custodia
pasara a su “supuesto padre” bajo
amenazas y coacciones de
la organización. Los agentes confirmaron que 15 días después de dar a
la luz, la víctima continuaba trabajando para la organización.
El Periódico, Santiago de Compostela, noticia completa, "Localizado un recién nacido dado en adopción ilegalmente".
Todos esos que han usado a esta mujer, siendo evidente además su estado de embarazo, son hombres con hijos e hijas, con nietas y nietos, con novia, con mujer, en definitiva, son los hombres que tenemos, los hombres que forman nuestra sociedad y con los que las mujeres nos tenemos que relacionar laboral, emocional y sexualmente.
Este caso no es único, sólo que esta vez se ha notado mucho por el tema de la adopción...algo tenían que hacer las autoridades cuando les llegó el soplo. Si no, hubiese quedado en el anonimato como una mujer más para consumo, en cualquier piso, en cualquier bar, en cualquier esquina o a domicilio, o a través de una pantalla de teléfono u ordenador.
En resumen, en cualquier sitio y por cualquier medio donde haya un hombre con mentalidad de uso y consumo de una mujer, mejor si está embarazada, todavía se deben sentir más poderosos ya que no hablamos de sexo, hablamos de ejercer el poder.
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